La tensión, el enfado del madridismo en la grada del Bernabéu se pudo ver también en el palco del estadio, donde no estaban para muchas historias tras caer 0-4 ante el Barcelona. Los responsables blancos dejaron ese palco muy 'tocados' por la situación que se vivió en el Clásico.
Como es habitual, Florentino Pérez bajó al vestuario del Real Madrid donde el ambiente era de frustración, de tristeza por lo sucedido. Los jugadores acabaron el Clásico frustrados y 'tocados' por el 0-4 encajado. Eso sí, ninguno de ellos dio la cara ante los medios de comunicación para hablar del partido. El único que habló ante la prensa fue Carlo Ancelotti.
¿Y ahora qué? Es lo que muchos se preguntan tras la debacle de ayer. En el club, como es costumbre, prefieren hacer los análisis de un desastre en frío, no en caliente. Así, dejarán pasar unos días para analizar lo que pasó en el Clásico.
Los dirigentes mantienen la confianza intacta en Ancelotti y la plantilla, pero también tienen claro que el equipo debe reaccionar de manera inmediata. El primero que lo sabe es el entrenador, consciente que algo debe tocar o cambiar en el equipo para que sea el de la temporada pasada, el que ganó Liga y Champions, y no el de la actual que, por el momento, está generando muchas dudas.